¿Novia escapa de su boda? Un insólito momento ocurrido en la ciudad de Bagua, Perú, ha causado revuelo en redes sociales, luego de que una novia decidiera rechazar el matrimonio en plena ceremonia, dejando a su prometido sorprendido y con el corazón roto.

El video del momento se ha viralizado, provocando todo tipo de reacciones entre los internautas.

Novia escapa de su boda

Elena y Cleber formaban parte de una boda comunitaria en la que 24 parejas se unirían en matrimonio civil.

En lo que se esperaba fuera un día de alegría, todo transcurría con normalidad hasta el momento crucial en que la jueza preguntó a Elena si aceptaba a Cleber como su esposo.

En ese instante, la mujer se mostró visiblemente nerviosa, tomó su ramo y comenzó a llorar.

Su prometido, con una sonrisa tensa, esperó su respuesta, pero lo inesperado sucedió: Elena agitó la mano y, antes de tomar el micrófono, exclamó: "Perdónenme todos, no acepto".

De inmediato, salió corriendo del lugar sin mirar atrás, dejando a los presentes completamente atónitos.

Reacciones encontradas en la ceremonia y redes sociales

Mientras Cleber quedó paralizado y su testigo se llevó las manos al pecho en señal de sorpresa, una de las autoridades presentes aplaudió la decisión de la novia, causando más asombro entre los asistentes.

El video del impactante momento fue grabado por uno de los invitados y compartido el 16 de febrero en la cuenta de X @Metropoles, donde ha acumulado miles de reproducciones y comentarios.

Antecedentes de los protagonistas

Aunque no se conocen detalles profundos sobre la relación de Elena y Cleber, se sabe que llevaban al menos tres años juntos antes de decidir casarse.

Sin embargo, la presión de una boda comunitaria, sumada a la posibilidad de dudas personales, pudo haber influido en la drástica decisión de la mujer.

Su valiente escape ha generado un debate en redes sobre el derecho a decir 'no' en el último momento.

El caso ha sido comparado con otras bodas interrumpidas de manera inesperada, dejando en claro que el compromiso matrimonial sigue siendo una decisión personal que, hasta el último instante, puede ser reconsiderada.