Publicado 19 Feb. 2025
Por: Redacción TVC
El papa Francisco sigue hospitalizado, y en caso de fallecimiento, se activaría el protocolo funerario del Vaticano con cambios en la ceremonia.
Publicado 19 Feb. 2025
Por: Redacción TVC
El Vaticano ha confirmado la hospitalización de Jorge Mario Bergoglio, quien asumió el papado en 2013 y ha enfrentado diversas afecciones de salud que generan preocupación a nivel mundial.
Esta situación también ha puesto en el centro del debate los protocolos relacionados con las ceremonias póstumas en caso de fallecimiento.
Siendo el primer papa de origen americano, Bergoglio ha liderado la Iglesia Católica durante 12 años, periodo en el que su estado de salud ha requerido atención constante.
Ante su actual internación, la Santa Sede mantiene informada a la comunidad creyente, esperando su pronta recuperación.
Debido a esta circunstancia, resulta relevante conocer los detalles sobre los ritos funerarios que se llevarían a cabo en caso de su deceso.
Este protocolo, establecido para la despedida de un Sumo Pontífice, se activa de manera inmediata tras la confirmación del fallecimiento.
El estado de salud del papa Francisco vuelve a ser tema de preocupación global, aunque los informes más recientes desde El Vaticano transmiten cierta tranquilidad.
Con 88 años de edad, su situación permite recordar las solemnes honras fúnebres que en su momento recibieron Juan Pablo II y Benedicto XVI, siguiendo la tradición de la Iglesia.
Según lo informado por la Santa Sede y ampliado por Catholic News Agency (CNA), el rito funerario papal ha sido actualizado recientemente.
La segunda edición típica del Ordo Exsequiarum Romani Pontificis, aprobada el 29 de abril de 2024 por el propio Francisco, introduce cambios significativos que simplifican el protocolo tras el fallecimiento del Sumo Pontífice.
El Vaticano consideró necesaria una segunda edición del rito funerario papal, impulsada por el deseo del papa Francisco de simplificar y adaptar ciertos rituales.
Según explicó el arzobispo Diego Ravelli, Maestro de las Celebraciones Litúrgicas de los Pontífices, esta actualización busca resaltar la fe en Cristo resucitado y presentar al Santo Padre fallecido como un pastor y discípulo de Cristo, en lugar de un líder terrenal con poder.
A pesar de estas modificaciones, la Santa Sede mantiene las tres “estaciones” tradicionales en el funeral papal: el domicilio del difunto, la Basílica Vaticana y el lugar de sepultura.
No obstante, se ha eliminado el primer traslado hacia el Palacio Apostólico, como parte del proceso de simplificación del protocolo y la adaptación de los títulos pontificios en la ceremonia.
El Vaticano continúa informando sobre la salud del papa Francisco a través de sus plataformas oficiales y redes sociales.
Según el diagnóstico compartido, el Sumo Pontífice enfrenta una “infección polimicrobiana del tracto respiratorio”, motivo por el cual permanece en “internamiento hospitalario adecuado” para su tratamiento.
Desde su hospitalización el 14 de febrero, su estado ha mostrado signos de estabilidad. Los últimos reportes confirman que “sigue sin fiebre y continúa con la terapia prescrita”, manteniéndose en una condición clínica estacionaria.
A pesar de su internamiento, la Santa Sede destaca que el papa ha seguido realizando algunas labores, dedicándose a la lectura y expresando su gratitud por las muestras de apoyo recibidas.