Alberto, la primera tormenta tropical de la temporada de huracanes, dejará fuertes lluvias en Honduras. El experto en temas climáticos César Quintanilla indicó a través de sus redes sociales que los hondureños continuarán siendo afectados por las precipitaciones.

Alberto se formó este miércoles en el oeste del Golfo de México. Se pronostican fuertes lluvias, inundaciones costeras y ráfagas de viento a lo largo de las costas de Texas y el noreste de México hasta el jueves.

Además, Honduras, Guatemala y El Salvador verán afectaciones.

“Alberto ha sido oficializado por el Centro de Huracanes como la primera tormenta tropical de la temporada 2024 en la cuenca del Atlántico.

Tiene vientos superiores a 65 kilómetros por hora y este jueves por la mañana impactará con fuertes lluvias la costa mexicana. Indirectamente continuará afectando a Honduras, El Salvador y Guatemala, mientras continúe arrastrando humedad desde el Pacífico”, detalló Quintanilla a través de sus cuentas de Instagram y X.

La tormenta tropical Alberto tocará tierra la noche del miércoles

De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, el temporal provocará lluvias torrenciales en siete estados de México.

La tormenta tropical Alberto se formó la mañana de este miércoles en el Golfo de México a partir del potencial ciclón tropical uno, según lo informado por el Servicio Meteorológico Nacional de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Se estima que este temporal toque tierra en las costas de Tamaulipas y Veracruz la noche de este miércoles o durante la madrugada del jueves.

La tormenta tropical Alberto, la primera tormenta con nombre de lo que se prevé sea una agitada temporada de huracanes, se formó en el suroeste del Golfo de México.

Se espera que Alberto traiga fuertes lluvias, inundaciones costeras y feroces vientos a las costas del noreste de México y Texas, donde millones están bajo alerta, advirtió el Centro Nacional de Huracanes (NHC).

Alberto se ubicaba a 300 kilómetros (185 millas) al este de Tampico, México, y a 480 kilómetros (295 millas) al sur-sureste de Brownsville, Texas. Tenía vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora (40 millas por hora), de acuerdo con el NHC en Miami.

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