Este toque de queda, que estuvo en vigor desde el 25 de junio en Choloma y desde el 4 de julio en San Pedro Sula, se implementó después de que más de 21 personas murieran de forma violenta en diferentes hechos, incluida una masacre, el sábado 24 de junio en el Valle de Sula.

El funcionario explicó que se decidió levantar la medida debido a los resultados obtenidos por la operación Candado, llevada a cabo por la Policía Nacional, y la operación Fe y Esperanza, realizada por las Fuerzas Armadas. Además, se destacó la incorporación de más de mil funcionarios al servicio de la seguridad ciudadana, la reasignación de casi 90 radio patrullas y vehículos interceptores.

"Los indicadores muestran una disminución significativa del 74% en el índice de homicidios en la zona. También reflejan el número significativo de allanamientos que estamos llevando a cabo, así como las detenciones y aprehensiones de personas con órdenes de captura o involucradas en algún tipo de delito", explicó el secretario Sánchez.

Asimismo, se destacó que la suspensión del toque de queda se realizó en respuesta a las peticiones de las fuerzas vivas de San Pedro Sula y Choloma, quienes criticaron el mecanismo debido a las pérdidas económicas generadas, especialmente en los negocios nocturnos y la economía informal, ya que la medida se estableció desde las 11:00 de la noche hasta las 4:00 de la mañana.

Sánchez enfatizó que, aunque hoy sea el último día del toque de queda, las fuerzas de seguridad seguirán llevando a cabo otras acciones para garantizar el bienestar de la ciudadanía. "Todo el complejo desarrollo de actividades de prevención, disuasión y control del delito seguirá presente en el Valle de Sula".