De acuerdo con la sampedrana, en aquel entonces ella y Castellanos tenían ocho años de casados y por ello decidieron que era el momento de hacer crecer su familia.

"Pasó el tiempo y yo no lograba quedar embarazada", recordó Mejía.

En aquel momento como pareja se pusieron a pensar en qué podían hacer, pues en realidad deseaban ser padres. Fue entonces que Dios les habló mediante un hombre al que se encontraron en un ascensor.

"Una persona se me acercó y nos dijo a mí y a mi esposo en un elevador... 'quiero decirles algo, usted no se preocupe'. Así de la nada. 'Usted va a quedar embarazada y va a tener un niño'", le dijo el hombre a la emprendedora.

Seguidamente el señor le preguntó a Castellanos el nombre de su papá y también el de ella. Esto, para revelarles cuál es el nombre que Dios quería que le pusieran al niño.

"Su hijo, manda a decir el señor, que se va a llamar Marco Jacob, que es sostenido por Dios", dijo aquel hombre.

Rosyl Mejía logró quedar embarazada, su hijo nació en mayo del 2021 y a pesar de que evitó ponerle el nombre que le dijo aquel señor, la profecía en su vida la marcó tanto a ella y su esposo que decidieron obedecer el que sería un mandato directo de Dios.

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