A pesar de mantener un perfil bajo, alejada del constante escrutinio público que rodea a su famoso tío y su prima Michelle Salas, Isabella ha logrado forjar su propio camino en el mundo digital, atrayendo a más de 36 mil seguidores que se deleitan con su belleza.

Hija de Alejandro Basteri y Alexandra Alcocer, Isabella, de 26 años, ha sabido cultivar una comunidad virtual que aprecia no solo su estética y su gusto por la moda, sino también la genuinidad y frescura que transmite a través de cada publicación.

Su conexión con sus seguidores es palpable, especialmente cuando estos no dudan en destacar el asombroso parecido con su abuela Marcela, comentando frecuentemente sobre la similitud en sus miradas, un legado de belleza que trasciende generaciones.

El interés en Isabella no se limita únicamente a su aspecto físico o su linaje. Recientemente, captó la atención mediática al compartir una imagen en Instagram posando con una bolsa estampada con mensajes feministas, un regalo de su tío Luis Miguel.

Sin buscarlo, la joven se ha posicionado como un reflejo de la elegancia y el carisma que caracterizan a los Basteri, demostrando que el encanto y la gracia son, definitivamente, parte del ADN familiar.

A medida que su popularidad crece, queda claro que Isabella no solo heredó la belleza de su abuela Marcela, sino también una chispa de luz que promete seguir brillando en el vasto cielo de las celebridades.

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