Publicado 14 Feb. 2024
Por: Bivian Montoya
Pasión en el campo y en el amor: las bellas mujeres que conquistaron a futbolistas hondureños
El día de San Valentín, conocido por ser la celebración del amor por excelencia, no pasa desapercibido para los futbolistas hondureños, quienes comparten sus historias de romance y complicidad con el mundo.
Annie Córdova, el motor detrás del éxito de Luis Palma, del Celtic de Escocia, es una muestra del amor que trasciende las barreras geográficas y culturales.
Valeria Aguilar, la musa inspiradora de Kevin Álvarez, jugador del Motagua, demuestra que el amor puede ser el impulso necesario para alcanzar la grandeza en el campo de juego.
Romell Quioto y su pareja, una isleña cuya belleza rivaliza con los paisajes paradisíacos, encarnan la fuerza del amor duradero y la complicidad en cada paso que dan.
Carlo Costly y su esposa, Tita Torres, son una pareja que ha resistido la prueba del tiempo y las dificultades, siendo un ejemplo de amor y apoyo mutuo para toda una nación.
Choco Lozano, con su novia como su mayor fan y confidente, demuestra que el amor verdadero puede encontrarse en los momentos más inesperados.
Edrick Menjívar y Takisha McNab, unidos en matrimonio, representan la fortaleza del amor que supera cualquier obstáculo, incluso las distancias entre continentes.
David Suazo y Elisa Secchi, una pareja que ha trascendido los límites del tiempo y la distancia, son un ejemplo de amor que florece en medio de la pasión por el fútbol.
Cristel Osorio y Yeison Mejía, una pareja que comparte la misma pasión por el deporte, demuestran que el amor puede surgir en los momentos más inesperados, incluso en las canchas de fútbol.
Carlos Pineda encontró el amor en Daniela Hernández, un motivo adicional para brillar en cada partido.
En este día especial, los futbolistas hondureños nos recuerdan que, más allá de los goles y las victorias en el campo de juego, el amor es el verdadero motor que impulsa sus vidas.