El gel desinfectante es uno de los principales productos que evitan la propagación del coronavirus pues mantienen las manos limpias y es recomendado para uso obligatorio en todo el mundo.

No obstante, si este contiene metanol puede convertirse en un producto tóxico. Este componente, también llamado alcohol metílico o alcohol de madera, provoca daños al organismo si se absorbe a través de la piel o si se ingiere vía oral.

Este producto ya ha sido detectado en muchos geles antibacterianos en los Estados Unidos y ante ello la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) alertó, la semana pasada, sobre nueve marcas del gel que tienen como proveedor a una empresa mexicana.

Mediante un comunicado la institución probó muestra de gel de dos marcas y una de ellas contenía 81 por ciento de alcohol y nada de alcohol etílico mientras que la otra contenía 28 por ciento del producto tóxico.

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“El metanol no es un ingrediente aceptable para los desinfectantes de manos y no debe usarse debido a sus efectos tóxicos”, advirtió la FDA.

Una representante de la empresa mexicana dijo a BBC Mundo que de momentos no darán ninguna declaración al respecto sobre la investigación de la administración estadounidense.

Búsqueda de ayuda médica

Ante ello las autoridades estadounidenses solicitaron a las personas que hayan tenido contacto con el metanol, la búsqueda de ayuda médica.

“Es fundamental para la posible reversión de los efectos tóxicos del envenenamiento por metanol”, señalaron.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) han insistido en que el gel evita la propagación del covid-19 pero el mismo debe de contener al menos 60 por ciento de alcohol, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.

“Muchos estudios han encontrado que los desinfectantes con una concentración de alcohol de un 60 a 95 por ciento son más eficaces para eliminar microbios que aquellos con una concentración de alcohol más baja, o que los desinfectantes de manos que no son a base de alcohol”, revela la FDA.

Por lo que en ningún casi el alcohol etílico, o etanol, puede ser sustituido por metanol, que se usas para múltiples funciones en la industria química, desde disolventes o anticongelantes hasta su uso como combustible.

¿Qué puede provocar?

La exposición sustancial al metanol puede provocar náuseas, vómitos, dolor de cabeza, visión borrosa, ceguera permanente, convulsiones, coma, daños permanentes en el sistema nervioso o la muerte.

“Los pacientes graves presentan respiración lenta y poco profunda y jadean. Se produce la muerte por insuficiencia respiratoria, que puede ser repentina o sobrevenir tras un coma de varias horas", estima el organismo.

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