Los usuarios de telefonía móvil que no cuenten con un registro biométrico podrían perder su línea, según advirtió Lorenzo Sauceda, presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel).

Esta medida forma parte de las disposiciones que regirán la compra de chips en las operadoras telefónicas del país.

Cada chip adquirido en las compañías deberá someterse a un proceso de reconocimiento facial y registro de huellas dactilares.

Pese a que existe una iniciativa de ley para regular esta normativa, actualmente sigue sin ser discutida en el Congreso Nacional, explicó Sauceda.

Implementación y reacciones ante las medidas de Conatel

Desde el gobierno, la presidenta Xiomara Castro ha instruido la difusión de esta campaña para que los ciudadanos estén informados sobre las nuevas disposiciones.

A partir de marzo, quienes adquieran un chip deberán completar el registro biométrico, mientras que los usuarios actuales tendrán del 1 de mayo al 1 de junio para realizar el trámite.

Las compañías telefónicas contarán con una aplicación especializada para gestionar el proceso. Sauceda enfatizó que quienes no cumplan con la actualización de datos perderán su número telefónico.

Sin embargo, la medida ha generado preocupación en la población, pues temen que una empresa privada tenga acceso a información biométrica sensible.

Algunos ciudadanos argumentan que el Registro Nacional de las Personas (RNP) ya almacena estos datos, pero al tratarse de una entidad estatal, ofrece mayor seguridad.

En redes sociales, la disposición ha sido cuestionada por sus implicaciones en la privacidad y el control de la información personal.