Alejandra Rodríguez, una abogada de 60 años, ha cautivado al público tras ser coronada como la nueva Miss Buenos Aires.

Su historia ha trascendido fronteras y se ha convertido en un símbolo de empoderamiento femenino, desafiando los estándares de belleza tradicionales.

Un triunfo que rompe barreras

Rodríguez, quien compitió contra mujeres de entre 18 y 73 años, destaca por su belleza natural, pero sobre todo por su actitud positiva y su mensaje de inclusión.

Su victoria en el certamen, que hasta hace poco limitaba la participación a mujeres menores de 28 años, marca un precedente importante en la industria de los concursos de belleza.

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Belleza integral: salud, ejercicio y genética

En cuanto a sus secretos para mantenerse radiante, Rodríguez asegura que la clave reside en un estilo de vida saludable. "Lo básico es tener una vida sana, alimentarse bien, hacer actividad física. Los cuidados normales, nada demasiado extraordinario y un poco de genética", afirma.

Una firme defensora de la inclusión

Rodríguez celebra la apertura de los concursos de belleza a la diversidad y considera que estos eventos deben valorar a la mujer en su totalidad, más allá de la belleza física.

"Estoy muy feliz de estar representando este nuevo paradigma en los certámenes de belleza. Básicamente porque estamos inaugurando una nueva etapa en la cual la mujer no es solo la belleza física sino otro conjunto de valores", concluye.

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